D-DS-42 – GRAN MISIÓN TRANSPORTE VENEZUELA EN LA INNOVACION TECNOLOGICA. – 29 de noviembre de 2020

ABORDAJE

1. La gran misión transporte debe ser un sistema integral.

2. La soberanía tecnológica ante el bloqueo.

3. Un servicio bioseguro en el método 7+7: economía saludable.

4. Prepararnos para un 2021 victorioso.

1) LA GRAN MISIÓN TRANSPORTE DEBE SER UN SISTEMA INTEGRAL.

-El transporte es uno de factores decisivos en la vida económica de un país. De él depende la conectividad efectiva y la circulación de todos los recursos que conforman el sistema productivo.

-El sistema de transporte constituido, sea público o privado, expresa y determina la vida social. Es por tanto una expresión de lo político.

-Si hacemos un paneo por el pasado reciente de la República y analizamos la infraestructura diseñada por el Pérezjimenismo y continuada con menos vigor por El Pacto de Puntofijo, encontraremos grandes autopistas que van desde un puerto a otro atravesando las principales ciudades. ¿Qué se expresa allí?: una economía de importación, una economía de puertos.

-El Estado no construyó esa infraestructra pensando en el desarrollo del país sino para salvar a la industria automovilística norteamericana, al llamado Fordismo, de la crisis.

-El país monoproductor de hidrocarburos, con gasolina gratis, sólo necesitaba una infraestructura para inundarla de carros.

-La IV República postergó los proyectos de transporte público como el Metro de Caracas y engavetó otros para continuar dándole ventajas a la importación de vehículos y al ensamblaje en menor medida.

-Los norteamericanos ya tenían el plan a mitad del siglo XX de desmontar todo el sistema ferroviario venezolano y lo fueron logrando poco a poco desarticulando territorialmente al país y despojando al Estado de esta responsabilidad soberana.

-Construir un verdadero sistema de transporte público: Ferroviario y automotor masivo, ha sido uno de los principales proyectos de la

Revolución.

-Articular los territorios productivos del país y brindar una movilidad masiva, digna y eficiente al pueblo conforma el proyecto productivo diversificado de las ciudades comunales.

-El transporte público es por tanto una expresión de soberanía territorial que debe expresar el cambio de rumbo del rentismo a la economía productiva.

-La distribución supervisada de productos básicos hechos en el país es clave para combatir la especulación y la usura.

-La puesta en marcha de un servicio público para el pueblo redunda en calidad de vida en cuanto a seguridad y protección del medio ambiente.

-Debemos mirar el transporte como un factor estratégico y

dinamizador de la vida social y productiva sustentable. Es una misión transversal a las demás: la salud, la educación, la alimentación, la recreación. La palabra misión le da el carácter urgente que tiene nuestra política de protección social y es necesario construir una nueva estructura para dar respuesta a las necesidades esenciales del país.

2)  LASOBERANÍA TECNOLÓGICA ANTE EL BLOQUEO.

– Los 5 años del Bloqueo han sido los más duros para la Revolución Bolivariana porque han hecho sufrir a nuestro pueblo privándolo de las cosas básicas para la vida: el acceso a la alimentación y a las medicinas, por ejemplo, y afectando su vida social con el boicot al transporte público y al transporte privado con los ataques directos a la producción de combustible.

-Paradójicamente estos han sido también los años en los que hemos avanzado más en la soberanía tecnológica. Nos vimos obligados por el compromiso con el país a mirar hacia nuestras propias capacidades e ingenio.

-Si el transporte es un factor esencial para la vida económica y social de un país, la tecnología es clave para que este factor pueda

operar como el gran dinamizador y articulador que es.

-La infraestructura pública al servicio del Fordismo, como ya dijimos, también fue expresión de subdesarrollo nacional. A la industria automotora del Imperio no le convenía ni traspasar tecnología ni permitir el desarrollo de ingeniería de tipo nacional.

-La soberanía de una República demanda soberanía en todos sus niveles: cultural, tecnológico, político, económico, territorial; y cada nivel guarda relación con el otro. No se pueden ver por separado.

-Desde la perspectiva del Transporte, en el nivel cultural se encuentra toda la sociedad cohesionada por su identidad, su historia y su ética; en el nivel político y científico la clase trabajadora y estudiantil juegan un papel importante no sólo desde el punto de vista de la consciencia sino de su capacidad de innovación y creación de tecnología liberadora, en la economía el Estado, pues el transporte por su carácter estratégico debe proteger y garantizar una gestión de óptima movilidad consolidando una red multimodal que facilite transporte de pasajeros, cargas e insumos para el buen vivir del pueblo y el desarrollo de la industria del sector, actividades conexas y apuntar a la soberanía, convirtiéndonos en ejemplo de nación vanguardista en batalla contra el injerencismo imperial.

– Este año 2020 que ha sido tan doblemente difícil por el bloqueo y la pandemia hemos logrado manufactura 100% venezolana en el mantenimiento y reparación de la infraestructura instalada, como el Metro de Caracas, y embarcaciones para el transporte de pasajeros y carga (Proyectos TAP y TAC), en sus modelos monocasco y catamarán. El Motor Transporte cuenta con el Plan Tren Caracas con la modernización y repotenciación de 22 trenes de la Línea 2 del Metro de Caracas con un significativo ahorro en divisas para la nación.

-¿Por qué antes no se pudo hacer? El rentismo era la peor de nuestras taras. Todo se arreglaba con billete, muchas veces despreciando al talento nacional y subestimando las capacidades propias de los trabajadores.

– El rentismo petrolero fue una arquitectura económica diseñada para debilitar al Estado y ponerlo al servicio de EE.UU. Querían mantener adormecidas y debilitadas las potencialidades económicas de Venezuela. Para el Imperio mantener en el poder a una casta política y empresarial servil y obediente a sus intereses neocolonialistas no era suficiente garantía. Era necesario mutilar el potencial nacional y por eso se imponía un modelo de importación absolutamente monodependiente.

– La Revolución Bolivariana ha desarrollado una democracia participativa y protagónica, más allá del Estado, incluso de los partidos, y se ha consolidado en cada barrio, en cada aldea con el surgimiento del poder popular y de la clase obrera nacionalista.

– Tenemos pendiente, y nos estamos haciendo cargo de desplegar ahora, la dimensión económica en consonancia con los logros políticos.

– La economía ha sido nuestro flanco débil porque estructuralmente así fue diseñada por Washington. A un país monoproductor minero y condicionado para comerciar con un solo cliente (EE.UU.) se le domina más fácil que a uno que tenga múltiples posibilidades y múltiples relaciones comerciales con el mundo.

Es hora pues de una revolución tecnológica, del socialismo industrial, del socialismo económicamente diversificado. De construir una economía de lo múltiple donde se engranen diversos actores: las comunidades organizadas, los trabajadores organizados.

-La Gran Misión Transporte se ha hecho grande en silencio

frente al bloqueo y ya entramos en la fase en que podemos no sólo mostrar logros concretos como los de hoy sino darles un reimpulso con la Ley Antibloqueo.

– Esta Ley Antibloqueo protege el desarrollo de las fuerzas productivas, de las riquezas de la nación y de todos los actores que participen de esta nueva era de refundación de nuestra economía. Venezuela tiene muchos amigos en el mundo que quieren contribuir con el desarrollo tecnológico e industrial con el que podemos fortalecer el sistema de transporte público.

– Pero la Ley Antibloqueo se complementa con una cultura del trabajo productivo y una consciencia nacionalista. Esto es muy importante porque la ley es sólo un instrumento para hacer posible la diversificación económica que a su vez depende de nuestras capacidades reales y de nuestra disciplina como gobierno, como pueblo, como clase trabajadora, como empresas del Estado, como emprendedores, en todas las instancias.

La organización obrera es necesaria para que algunas empresas del Estado funcionen y sean en realidad rentables, productoras de riqueza. [Es necesario] Vencer el burocratismo y la ineficiencia gerencial.

La empresa privada de carácter nacionalista debe estar a la altura para producir tecnología soberana que garantice la efectividad productiva y nos permita exportar. Revertir la economía de puertos y convertirnos en una economía productiva que capte recursos para la nación.

Los nuevos emprendedores deben innovar y potenciar áreas inexploradas de nuestros potenciales de riqueza. Las criptomonedas abren un mundo diferente de opciones. Debemos asumir el Petro como moneda dinamizadora de las nuevas formas productivas, servicios y bienes asociados a las nuevas tecnologías que encuentran en Venezuela una cantera de talentos y de opciones.

– La banca pública y privada tiene que ser protagonista de este plan de reinvención de la economía apostando por la empresa emergente, apoyando a la empresa consolidada que haya demostrado su compromiso con la patria.

El Estado soberano e independiente debe aportar las condiciones y dar garantías suficientes a la inversión nacional y extranjera sin que ello signifique sacrificar la soberanía de nuestras leyes, nuestro territorio y su vocación social, de justicia y de derecho.

– Nuestra principal industria seguirá siendo el Petróleo por unos años más pero su reactivación tiene que estar orientada y acompañada estratégicamente hacia la diversificación económica.

– Vamos a resolver el problema de la dependencia económica en esta nueva fase, pero lo haremos innovando.

– Lo que buscamos es un equilibrio entre producción de riquezas y derechos sociales. Entre desarrollo de las fuerzas productivas y desarrollo social.

-Países como Irán, Cuba, Corea del Norte, que han sido Bloqueados y perseguidos financieramente y que han sufrido el terrorismo contra sus industrias productivas por el Imperio, han salido adelante porque se propusieron inventar sus propias tecnologías y fortalecieron sus capacidades industriales

– A nosotros recientemente intentaron siniestrarnos Amuay para detener la producción de combustible para el pueblo y se han encontrado con una clase obrera firme en su moral e inquebrantable en su deber de defender la patria.

– Venezuela cree más en sí misma. No tengo dudas y este es el momento de desplegar todas nuestras capacidades para blindar el país.

3) UN SERVICIO BIOSEGURO EN EL MÉTODO 7+7: ECONOMÍA SALUDABLE

– El método 7+7 se fue configurando pensando en todas las dimensiones y todos los actores del país. Cuidamos la salud del pueblo con las medidas tempranas: cuarentena radical los primeros tres meses y medidas de bioseguridad personal. 

– Hicimos acompañar todo aquello de medidas de protección integral: protección de empleos pagando la nómina pública y privada (de la pequeña y mediana empresa), bonos del sistema patria, congelación de alquileres domésticos y comerciales, así como de pagos por cuotas de los créditos bancarios adquiridos; además de la creación de nuevos créditos al sector privado para dinamizar la economía.

– Y con los óptimos resultados en la mitigación dimos paso a la flexibilización productiva que fue progresiva y ahora es ampliada.

-El Transporte público que es un vector de alto riesgo en el contagio asumió en nuestro país una tarea titánica con la desinfección permanente y el control del buen uso por parte del pueblo. Los felicito, pero al mismo tiempo debo exigirles mucho más. Estamos en un monento en el que no podemos aflojar ni un minuto las medidas.

-Noviembre y diciembre son dos meses de mucha movilidad económica y social. Les pido un plan especial para estos días en los que debemos garantizarle al pueblo su salud. Hemos mitigado y controlado la pandemia, pero no hemos ganado la guerra aún al Coronavirus. En Europa relajaron las medidas y ya se ven las consecuencias con una segunda ola aún más letal y agresiva que la primera.

 -Una campaña informativa de prevención y uso del Metro y del servicio público terrestre y máxima supervisión.

– Apostamos por la recuperación y necesitamos reciprocidad en el sentido de que seamos cada vez más comprometidos con el país. Y hay una manera urgente de hacerlo: trabajar todos juntos por la recuperación económica, la recuperación de la calidad de vida del pueblo.

 -Tenemos todas las riquezas, tenemos la inteligencia, tenemos el coraje, debemos confluir en el compromiso nacional.

4) PREPARARNOS PARA UN 2021 VICTORIOSO.

– Cerraremos el año con los mejores índices mundiales en la lucha contra la Pandemia: 94% de pacientes recuperados, la más baja tasa de fatalidad (por debajo del 1% por millón de habitantes), un sistema de salud fortalecido que ha atendido a más del 90% de los infectados en todo el histórico, es decir de los 93.100 casos acumulados 83.790 fueron atendidos por el Estado de manera gratuita.

– Ahora tenemos la honra de presentar al mundo, gracias al ingenio científico venezolano, un potencial tratamiento 100% efectivo contra el Covid-19. La Molécula DR10, un aporte para la humanidad.

– El mundo después del Covid-19 tiene que tender a la socialización y a las relaciones de una economía real y complementaria.

– El 6 de diciembre tendremos elecciones parlamentarias que estoy seguro traerán estabilidad al país: demostraremos al mundo que este pueblo no sólo es pacífico, sino que tiene una capacidad política para resolver sus asuntos de la que podrían aprender otros países que hoy viven una profunda crisis institucional y social.

-Hoy se estará llevando a cabo el segundo debate nacional a través de Televen con los candidatos del GPP: Hernán Escarrá e Ilenia Medina y los de las distintas alianzas opositoras: María Verdeal y Carlos Britto. Ideas confrontadas en el marco de la tolerancia democrática y de la soberanía nacional.

-Pasaremos un diciembre en paz, como siempre, de concordia y de esperanza. Ha sido un 2020 que nos dio grandes lecciones y nos hizo más fuertes a todos y a todas.