D-DS-36 – DÍA DE LA DIGNIDAD NACIONAL Y 13º ANIVERSARIO DE LA MILICIA BOLIVARIANA. – 13 de abril de 2022
ABORDAJE:
1)LA REVOLUCIÓN BOLIVARIANA NACIÓ CON DOS PROPÓSITOS: EVITAR UNA GUERRA CIVIL ANTE LA CAÍDA DEL VIEJO MODELO Y REIVENTARLO, Y DEVOLVER LA JUSTICIA Y LA DIGNIDAD ROBADA AL PUEBLO.
-Nadie podía imaginarse que este recinto se iba a convertir en uno de los vértices más importantes para la rebelión popular que venía gestándose hacía décadas de una manera tan dispersa, que ni los propios actores de entonces podíamos identificar.
-Mientras en las calles los estudiantes, los sindicatos de trabajadores, los pensionados, los desempleados, el pueblo en suma, desesperado, se enfrentaba como podía contra el neoliberalismo impuesto a sangre y fuego por la IV República, en los cuarteles germinaba la indignación ante la decadencia moral e institucional de un país sometido por completo a la voluntad de los gringos.
-Era muy temprano aún para reconocernos como parte de una misma fuerza y una misma voluntad colectiva, pero estaba claro en ese momento que la llamada democracia puntofijista, luego de la masacre del 27 de febrero, había quedado deslegitimada y estaba destinada a sucumbir no sin antes generar un conflicto nacional de dimensiones sociales trágicas.
-Algo tenia que pasar, alguien tenia que hacer algo: tomar la batuta y orquestar la rabia acumulada de un pueblo sometido por las élites del Pacto de Nueva York, a un despojo sistemático de sus derechos elementales. Y pasó lo que podía pasar entonces: la rebelión de aquel estallido del año 89 había tenido eco en una generación alumbrada por los ideales de Bolívar, Zamora y Rodríguez.
-27F y 4F: Dos claros momentos [exponentes] de que la patria había despertado para encontrarnos en una esperanza de cambio y en una batalla contra el neoliberalismo: la fase superior del imperialismo contemporáneo.
-El camino a Miraflores fue largo y lleno de obstáculos. Bien conocemos esa historia de repolitización de un país que se había abandonado a la resignación por mucho tiempo y comenzaba a reaccionar ante la posibilidad real de cambio. La Revolución Bolivariana tuvo la virtud de convocar la diversidad política y cultural que ante las nuevas realidades resistía al capitalismo mundial sin proyecto alguno.
-El comandante Chávez fue un líder que supo interpretar la diversidad de este pueblo, la complejidad social y las contradicciones que se habían agudizado durante 4 décadas de subgobiernos que más que mandar obedecían al Departamento de Estado.
-Estoy plenamente convencido de algo: sin la emergencia de un líder como Chávez (y de un proyecto como el que se esbozó desde el inicio, fundamentado en la justicia social, en la dignidad nacional, en la esperanza de cambiarlo todo) Venezuela habría tarde o temprano sucumbido a la violencia, a la autodestrucción. Ese era el escenario ideal para los Estados Unidos que ya habían decidido deslastrarse de los partidos políticos tradicionales y pasarle el mando, luego de anarquizar el país, a una casta tecnocrática, empresarial y mediática que asumiría “la gerencia” de la nación para convertirla en una filial más de las corporaciones globalizadas que se tomaban el mundo por asalto.
-La casi absoluta adhesión social al proyecto de refundación de la República y al liderazgo del comandante Chávez fue un signo de que las cosas habían cambiado para siempre en el país, y la élite no lo quiso ver.
-De hecho, la negación irracional y la arrogancia desmesurada de esa élite que había perdido el vínculo con la realidad política del país, con el pueblo; les llevó a pensar que la Revolución y el liderazgo de Chávez podían borrarse de un plumazo.
-La Revolución llegó al poder para iniciar una redistribución de la riqueza y superar las condiciones de opresión que se habían impuesto en las últimas décadas.
-Las élites apoyadas por los EE.UU iniciaron la guerra que la revolución vino a evitar.
2) ANTE LA PÉRDIDA DEL CONTROL POLÍTICO DEL ESTADO Y FRENTE A LOS CAMBIOS ACELERADOS DE LA REVOLUCIÓN, EE.UU. FUE CREANDO EL RELATO PARA LEGITIMAR SUS AGRESIONES. TODO EMPEZÓ CON UN MENSAJE DE ODIO GENERALIZADO.
-Las élites desde su arrogancia no podían entender el vínculo tan poderoso que se había construido entre el comandante Chávez y el pueblo. Un vínculo tan afectivo como ideológico que se fortalecía en las dificultades. No fue un inicio de gobierno fácil: el país estaba quebrado, la deuda social era casi impagable, las obstrucciones partidistas estaban a flor de piel y el clima conspirativo se afianzaba en unos poderes mediático-empresariales que se debatían en sus intentos entre domar a Hugo Chávez y destruirlo mediáticamente.
-La estrategia de infundir temor sobre los cambios profundos que se iban planteando en una coyuntura de mucha controversia, fue el inicio de una campaña, sostenida hasta el día de hoy, que se basaba en el odio generalizado hacia el chavismo y en la estigmatización de los pobres.
-El proceso de cambio ya era indetenible. Venía de muy lejos y estaba muy arraigado en el espíritu nacional. Era un fenómeno político irreversible. La clave estaba en la visión revolucionaria y la acción estratégica que motorizaba los cambios. Se prometió una constituyente y se hizo. Se prometió una Carta Magna avanzada en derechos sociales y políticos y se hizo bajo consulta del pueblo.
-Nos subestimaban, pensaban que nuestro proceso era puro populismo incapaz de cambiar las cosas para bien de las mayorías.
-Y cuando era un hecho irreconciliable la preexistencia de un Estado diseñado para excluir, administrar la injusticia y garantizar que nada cambie ni se mueva, el comandante Chávez se propuso por la vía de leyes habilitantes, dar un salto cualitativo y cuantitativo para democratizar la tierra y desarrollar las potencialidades agrarias del país, para ejercer la soberanía sobre nuestros hidrocarburos y gobernar la economía nacional que hasta entonces estaba bajo el mando discrecional de una élite tecnocrática petrolera que se sentía dueña del país.
-La reforma de la Ley habilitante aprobada por la AN en noviembre del 2000 fue un mensaje claro al mundo de que en Venezuela había un gobierno legítimo y libre de coacción norteamericana que estaba dispuesto a hacer justicia social y a desarrollar las fuerzas productivas de la patria.
-Estaba claro que el comandante Chávez no estaba bajo la tutela de los ricos del mundo sino comprometido con el pueblo que se esperanzó y le dio el poder. El poder que sólo es revolucionario si logra transformar la realidad, si logra crear mejores condiciones para todos.
-La clase media -que había desaparecido de la faz de la tierra por culpa de los paquetes neoliberales del FMI y tomaba un segundo aire con nuestro proceso de cambio que vino a suprimir los créditos indexados y detuvo la privatización de los servicios- no supo entender lo que estaba en juego. Sucumbió al miedo y se convirtió por completo en un batallón al servicio de la propaganda de odio. Así comenzó todo.
-En el año 2001 EE.UU invade Afganistán bajo el pretexto del terrorismo: la nueva jerga de la política exterior norteamericana que vino a sustituir al comunismo: el viejo enemigo de la guerra fría. Aquel mensaje de Bush luego del atentado contra las Torres Gemelas: “si no estás conmigo estás contra mí” fue la doctrina de recolonización del sur del mundo.
-La crítica valiente, humanista, necesaria, que el comandante Chávez le hizo a esa invasión sangrienta contra un pueblo desarmado, contra niños y mujeres, fue el detonante del golpe.
– El departamento de Estado dio la orden en ese momento al confirmarse que el nuestro era y sería por siempre un gobierno soberano, con principios propios, independientes y con una raíz histórica antimperialista.
3) ERA PREVISIBILE QUE EE.UU DIERA UN GOLPE. LA ÚNICA SORPRESA FUE QUE LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN ESTABAN DIRIGIENDO LA CONSPIRACIÓN CONTRA EL COMANDANTE CHÁVEZ.
-Estoy seguro que en Washington tenían diseñado el plan para un cambio de régimen a la fuerza en Venezuela, muchos antes de que Hugo Chávez llegara al poder. Todos los golpes de Estado sufridos en Latinoamérica han sido made in USA: República Dominicana, 1963, golpe contra Juan Bosch. Brasil, 1964, golpe contra el presidente João Goulart. En Argentina 1966, Uruguay, 1973. Ese mismo año derrocan a Salvador Allende (Chile). En 1979 dan otro golpe en el Salvador, esta vez contra Carlos Humberto Romero. No importa si eran gobiernos aliados o de derecha, basta con que cambien los intereses. Por eso invaden Panamá en 1982. Y hacia adelante.
2004, golpe a Jean-Bertrand Aristide, y sumergen a Haití en el caos. En Honduras contra Zelaya el 2009. En fin. El golpe es el plan B del imperialismo, cuando falla la subordinación voluntaria de los gobiernos.
-Lo imprevisible hace 20 años no era la posibilidad de un golpe de Estado, ni los actores que pondrían la cara a la peligrosa aventura. Desde el paro patronal convocado por Fedecámaras en diciembre de 2001 estaba claro que las élites empresariales, los viejos partidos políticos (AD y COPEI) los Chicago-boys (Primero Justicia) y las mafias sindicales se pondrían al frente de la conspiración escrita y ordenada por el Departamento de Estado.
-Cómo lo lograrían y de qué manera es la innovación táctica que se pone en práctica por primera vez en Venezuela. El golpe lo dirigieron los medios de comunicación privados quienes habían creado las condiciones psicológicas de temor, odio y violencia en la clase media venezolana suficiente para una puesta en escena macabra, terrorífica como la que vimos un día como hoy, hace 20 años, en vivo y en directo.
-El golpe fue una puesta en escena, el primer fake news que se configura con víctimas reales, llevadas a una trampa fatal, con francotiradores y cámaras bien ubicadas para transmitir como si fuese un show el asesinato de hombres y mujeres que marchaban en un bando y en otro.
-Los medios dirigieron el malestar social manipulando con mentiras a la clase media, los medios montaron la escena del crimen y todo lo que sucedió a partir de consumarse la masacre: mentiras tras mentiras crearon la matriz de que Chávez había disparado y desencadenaron el golpe con pronunciamientos escritos y grabados por ellos mismos.
-Dejaron de ser medios para convertirse en la fuerza política del fascismo que se consumaría por 24 horas como el primer golpe mediático de la historia.
4)ELLOS PENSARON QUE EL PUEBLO Y LA FUERZA ARMADA IBAN A SER ESPECTADORES PASIVOS DE ESTA PELÍCULA DE HORROR. EL 12 Y 13 DE ABRIL NACIÓ EL PODER POPULAR: LA UNIÓN CÍVICO MILITAR, HOY POR HOY LA MÁS GRANDE GARANTÍA DE PATRIA.
-Ayer en un encuentro con los invitados internacionales que asisten a La cumbre contra el fascismo, rememorábamos, en el Salón Ayacucho, el nefasto episodio del 12 de abril: cuando se consumaba el golpe de Estado y la extrema derecha se quitaba la máscara de “sociedad civil desarmada”. En vivo y directo, siguiendo el guion de los medios, el país y el mundo veían a una manada de carroñeros devorar los derechos conquistados de forma democrática, la esperanza de un pueblo que pasó de la indignación a la acción dignificadora de hacer patria.
-El show sangriento había terminado con el falso positivo de la supuesta masacre de Llaguno y la supuesta renuncia de Chávez. Luego de eso vinieron las persecuciones en vivo y directo contra gobernadores, diputados, alcaldes, líderes sociales. Y de ahí en más el silencio mediático reinó el 12 de abril: Las tiras cómicas llenaron las pantallas de los medios privados, a diferencia del día anterior que los dueños de las televisoras en conjunto aupaban la toma del poder por parte de los poderes fácticos preparando el terreno para la ejecución del golpe de Estado. En las radios sólo se escuchaba música y se ausentaron las noticias.
-Ellos creían que el pueblo se iba a conformar con ver, como un espectador pasivo y resignado, este final de partida. Borrachos de poder y creyéndose la mentira de que el país eran ellos, quienes habían sucumbido al odio, no daban crédito a la capacidad política del pueblo.
-De las cacerolas a la pancartas, del boca a boca al mensaje de texto, del mensajito a la reunión con la verdad en altavoz: ¡Chávez no renunció! ¡Lo tienen secuestrado en la Orchila! Allí nació el poder popular, la comunicación popular, la fuerza popular dispuesta a todo por revertir el golpe fascista.
-Y en los cuarteles pasaba algo parecido: la tropa se reunía para cuestionar a la élite militar vendida. Se enviaban de cuartel a cuartel mensajes de indignación y de convocatoria a la resistencia. Fue un segundo 4 de febrero en pleno abril: rebelión contra el imperio y la élite entreguista.
-El pueblo se fue a los cuarteles a buscar a los soldados patriotas, algo que jamás se habría imaginado nadie. Y allí los recibieron con banderas tricolor. Era la señal de que la tropa estaba con el pueblo y de que el pueblo no estaba desamparado como antes.
-Ese día nació la union cívico militar que es la garantía de soberanía, de independencia y de dignidad.
-Y cuánto le debemos a ese día de fusion popular: 20 años después hemos podido desmontar el golpe continuado con la garantía de tener un pueblo en armas con una doctrina militar y política propia, con una causa común inexpugnable: la independencia absoluta.
-Se movió el pueblo en armas hacia Miraflores, se volcó a las calles en todo el país y las ratas salieron huyendo sin poder beber sus whiskies ni disfrutar de las mieles de lo robado.
-El Salón lleva el nombre de Ayacucho que simboliza el último enfrentamiento de toda la gesta independentista que dio la libertad definitiva al Perú y a la América Meridional, así llamada. La historia no podía terminar con la usurpación de los anti bolivarianos y proimperialistas del poder. Mucho menos por la fuerza. Siempre recordaremos al negro Aristóbulo Isturiz, el profe, entrando al Salón Ayacucho. Recordaremos a Diosdado recibiendo la banda presidencial para proteger el hilo constitucional mientras los patriotas iban al rescate de Chávez. El pase de banda que es símbolo de lealtad absoluta e irrompible.
– Pudo más la lealtad que la traición. Y esa victoria no es poca cosa: es derrotar la única arma que tiene el imperio para dominarnos: la división, la traición, la corrupción del alma revolucionaria.
-El 13 de abril volvimos, colocamos el cuadro del Libertador en su lugar y se retomó el poder sin disparar una bala, sin perseguir a los usurpadores: ellos salieron corriendo como ratas cuando el mismo 12 el pueblo empezó a bajar de los cerros rumbo a Miraflores.
-Se pudo romper el cerco mediático, se pudo revertir el golpe de Estado, se pudo resistir y se pudo renacer para revolucionar la patria.
-¿Qué hizo el comandante al regresar? ¿Inició una cacería de brujas? ¿Le echó más gasolina al fuego? No, eso es lo que el departamento de Estado hubiera querido que pasara. Nada nos iba a sacar del proyecto estratégico que era cambiar definitivamente este país. Ahora más que nunca con la muestra que dio el poder popular se lograría.
-Recuerdo las palabras del comandante al llegar de La Orchila: “Yo he estado incomunicado en las últimas horas y no tenía ninguna información de lo que estaba pasando y tenía una angustia muy grande y, lo primero y más importante que digo a todos los venezolanos es que vuelvan a sus casas, que vuelva la calma”. Con la constitución en la mano, es decir dando garantía de que el poder había vuelto a las manos del pueblo.
-Chávez había tenido tiempo para reflexionar y pensar en el futuro: “Estos acontecimientos que trajeron sangre y dolor, son sin embargo y deben ser una gigantesca lección para todos nosotros; que todos seamos capaces de mirar allí, que todos seamos capaces de leer esa lección, que todos seamos capaces de extraer de allí conclusiones, enseñanzas”
En medio de aquellas palabras como muestra de grandeza y a pesar de las circunstancias a las que fue sometido dijo: “Yo, así lo digo en nombre del Gobierno Revolucionario y Bolivariano, pacífico y democrático, no vengo con ninguna carga de odio ni de rencor contra nadie, absolutamente, no caben en mi corazón ni el odio ni el rencor”
“Retorno después de dos días de ausencia, de incertidumbres. Retorno cargado espiritualmente de un gran amor, y sobre todo, si hace dos días yo los amaba a ustedes, hoy después de esta jornada histórica, de esta demostración sin precedentes en el mundo de cómo un pueblo y sus soldados detienen una contrarrevolución y hacen una contra – contrarrevolución, sin disparar un tiro, sin derramar sangre, y reponen las cosas en su sitio; después de esta jornada memorable, histórica, imborrable para siempre jamás, si ayer los amaba, hoy los amo muchísimo más. Amor con amor se paga”. Y ese amor se ha hecho el mayor escudo que pueda tener una patria.